Ya llevamos una semana de operación, la perra se encuentra muy bien. La verdad es que parece mentira que después de la operación pueda apoyar la pata tan bien y que apenas parezca molestarla. Tanto es así que nos han dado permiso a que se de un pequeñísimo paseo para intentar que se le baje un poco el nivel de ansiedad que tiene al salir de casa. Ya que está continuamente buscando juegos y estímulos para jugar y jugar.
Hoy en el paseo de la tarde / noche hemos tenido un sobresalto y nos hemos encontrado con un gato callejero, y como no, Shiva a arrancado para ir a cogerlo y me ha pillado de sorpresa. No he podido sujetarla bien y ha hecho un esfuerzo con la pata que es justo lo que el veterinario y el traumatólogo nos dijeron que no debía hacer.
Al revisarle la pata antes de irnos a acostar a la hora de darla las pastillas y realizarla las curas, no parece que tenga nada solo un poco más hinchado.
Espero que no le haya pasado nada y nos hayamos tirado al traste la recuperación a las primeras de cambio.